Doble limpieza: qué es, cómo hacerla y los mejores limpiadores para cada piel
La limpieza es la base de cualquier rutina de cuidado de la piel y es sin duda, el paso más importante. Para muchos, la doble limpieza se ha convertido en un ritual imprescindible. Ya sea que uses maquillaje, protector solar o simplemente quieras asegurarte de que tu piel esté completamente impecable, elegir el limpiador adecuado para tu tipo de piel es clave. Pero con tantas opciones disponibles, ¿cómo saber cuál es el mejor para ti? En esta guía, exploramos los diferentes tipos de limpiadores – incluyendo leches, bálsamos, trifásicos y aguas de limpieza – para ayudarte a encontrar la mejor opción para tu piel.
Leches limpiadoras: Hidratación suave para pieles delicadas
Si tu piel tiende a la sequedad, sensibilidad o deshidratación, una leche limpiadora es una excelente elección. Estas fórmulas suaves y cremosas limpian sin resecar ni eliminar los aceites naturales de la piel, por lo que son ideales para quienes experimentan tirantez después de lavarse el rostro.
¿Por qué elegir una leche limpiadora?
- Ideal para pieles secas y sensibles.
- Elimina impurezas sin alterar la hidratación.
- Deja la piel suave, equilibrada y confortable.
Si buscas incorporar la doble limpieza, una leche limpiadora puede usarse como segundo paso tras un limpiador en aceite o trifásico. Nuestra Purifying Cleansing Beauty Cream es el ejemplo perfecto: elimina impurezas con suavidad mientras aporta lípidos claves, minimizando así, la parte más hostil de este paso.
Las leches limpiadoras también son ideales para la mañana, cuando la piel necesita una limpieza ligera más que una limpieza profunda. Aportan hidratación mientras eliminan los restos de sebo nocturno, dejando la piel lista para el día.
Bálsamos y aceites limpiadores: El mejor aliado para eliminar maquillaje y protector solar
Los bálsamos y aceites limpiadores son los favoritos de quienes les gusta disfrutar de una experiencia sensorial de limpieza. Son ideales para disolver maquillaje resistente, SPF y exceso de sebo sin alterar la barrera cutánea.
¿Por qué elegir un bálsamo limpiador?
- Deshace el maquillaje y el protector solar con facilidad.
- Nutre la piel y en algunos casos puede usarse como mascarilla hidratante.
- Perfecto como primer paso en una doble limpieza.
Nuestro Clementine Cleansing Balm es un bálsamo rico y sedoso, ideal para masajear la piel y eliminar impurezas antes de retirar con nuestra muselina ultra suave.
Los bálsamos limpiadores aportan lípidos esenciales y confort, por lo que son especialmente beneficiosos para pieles secas o maduras. También permiten realizar masajes faciales, favoreciendo la circulación y potenciando la luminosidad mientras limpias la piel.
Limpiadores trifásicos: Transformación en cada aplicación
A diferencia de los aceites limpiadores tradicionales, los limpiadores trifásicos ofrecen una experiencia única al cambiar de textura durante la limpieza. Comienzan como gel o aceite, transformándose en leche o espuma al contacto con el agua, garantizando una limpieza profunda pero suave.
¿Por qué elegir un limpiador trifásico?
- Limpieza profunda sin resecar.
- Ideal para pieles mixtas o con tendencia a la congestión.
- Elimina eficazmente la polución, el SPF y aportan luminosidad a la piel.
Si tienes tendencia a brotes o piel congestionada, un limpiador trifásico es una excelente opción como primer paso en tu doble limpieza. Charcoal Peace Calming Cleanser combina carbón de grado medicinal con ingredientes calmantes, logrando una limpieza profunda pero delicada con la piel, apta incluso para su uso diario.
Los limpiadores trifásicos ofrecen los beneficios de varios pasos de limpieza en un solo producto, siendo una opción valida para quienes buscan una rutina rápida pero efectiva. Son especialmente útiles si vives en una ciudad con altos niveles de contaminación, ya que ayudan a eliminar partículas microscópicas de la piel.
Aguas de limpieza: Una alternativa única al agua micelar
Las aguas de limpieza suelen confundirse con las aguas micelares, pero la diferencia está en su formulación. Las aguas micelares tradicionales contienen tensioactivos, que forman micelas para atraer la suciedad. Aunque sean de origen natural, estos tensioactivos pueden irritar la piel. Además, deben formularse con un pH alrededor de 7.4 para evitar la irritación ocular, más alto que el pH natural de la piel (5). Aunque la piel puede restablecer su equilibrio, el uso continuado de aguas micelares puede ser perjudicial a largo plazo.
Aquí es donde Dara’s Water marca la diferencia. A diferencia de las aguas micelares convencionales, no contiene tensioactivos. En su lugar, utiliza una combinación única de polisacáridos e ingredientes humectantes para eliminar impurezas de forma eficaz pero ultra suave. Dara’s Water es el testimonio de lo mucho que los ingredientes naturales han evolucionado en los últimos 20 años.
¿Por qué elegir Dara’s Water?
- Fórmula sin tensioactivos, minimizando el riesgo de irritación.
- pH equilibrado, adecuado incluso para las pieles más reactivas.
- Alta concentración de extractos botánicos: el 20% de la fórmula contiene extractos de rosa y avena ecológicos, lo que reduce la necesidad de conservantes adicionales.
- Elaborada a mano en pequeños lotes para garantizar frescura y potencia.
Dara’s Water ofrece una limpieza refrescante mientras respeta el equilibrio natural de la piel. Es lo suficientemente suave para el uso diario, incluso en la delicada zona del contorno de ojos.
¿Necesitas una doble limpieza?
La doble limpieza se ha popularizado porque ofrece resultados inmediatos, sobre todo si usas protector solar o maquillaje a diario o vives en un entorno urbano. Usar un limpiador en aceite o trifásico para disolver impurezas seguido de un limpiador en leche o suave garantiza una limpieza profunda sin alterar la barrera cutánea.
¿Quién debería hacer doble limpieza?
- Quienes usan protector solar o maquillaje todos los días.
- La contaminación es una amenaza real y lamentablemente la gran mayoría vivimos en zonas afectadas por ella.
- Si usas ingredientes activos en tu rutina, ya que una piel completamente limpia mejora la absorción de sueros y tratamientos.
- Para quienes disfrutan de un ritual de cuidado facial más sensorial al final del día.
Personaliza tu rutina de doble limpieza
Aunque el principio de la doble limpieza es universal, debe adaptarse a las necesidades de tu piel:
- Para piel seca o sensible: Usa un bálsamo o leche limpiadora y sigue con un agua limpiadora hidratante.
- Para piel mixta o grasa: Empieza con un limpiador trifásico para eliminar el exceso de sebo y sigue con uno calmante o equilibrante.
- Para quienes usan poco maquillaje: Una sola limpieza con el producto adecuado puede ser suficiente, pero la doble limpieza asegura la eliminación completa del SPF y las partículas de contaminación que se depositan en la piel.
Al elegir los limpiadores adecuados según las necesidades de tu piel, puedes crear una rutina que la deje equilibrada, confortable y fresca. Si aún no has probado la doble limpieza, ahora puede ser el momento perfecto para empezar.
Un comentario en “Doble limpieza: qué es, cómo hacerla y los mejores limpiadores para cada piel”
Da gusto qué nos recordéis esta información. Gracias.